La vida, anécdotas y estupideces de un creativo mexicano, con el ego de un argentino, que cocina pasta italiana, tiene un coche gringo, un radio japonés y que ama la música francesa. (Este espacio azul está muy grande y ya no se que escribir para llenarlo).



El día que me cambió el horario...

Una vez, cuando viví mi -tan intensa y larga- prepa, como ya era costumbre nos fuimos a echar un billar al famosísimo "recreo" (lugar de mala muerte, ubicado a un costado de la iglesia central de Coyoacán), Toño "Bloodbat", Alejandro "Pooh" y su servidor, siempre en la búsqueda de los tiros de fantasía y de amores esporádicos (que gracias a nuestro look eran fáciles de encontrar), y es que no se por que extraña razón cuando eres más chico, el look "rudo", pelo largo, todo de negro, músico callejero, extrañamente conocedor de temas de vampirismo y esas cosas, traes una especie de imán con las chavitas, especialmente las "fresas" que se creen "rudas"...

Después de aventarnos nuestra primera hora en una mesa de "carambola" -esa modalidad sin buchacas y que el chiste es hacer que choquen las tres bolas de una manera planeada-, decidimos jugar el ya degradado "pool" (lo que todo el mundo conoce como billar).

Apenas estábamos abriendo el primer juego cuando nuestro ya preparado "olfato" nos hizo voltear hacia una de las mesas de al lado...

Ahí, a menos de 2 metros de nosotros había 3 chavitas, con las características antes citadas tratando de jugar pool. Ante la oportunidad de ligue, muy caballerosamente nos ofrecimos a dejar nuestra mesa y a compartir la de ellas en un juego de "parejas" y -obviamente- correr con la mitad de los gastos de la hora de billar, mientras les dábamos unas "clases" sobre el uso de los diamantes...

Las chavitas accedieron, y en menos de 3 minutos ya habíamos -como dice el perro Bermudez- "cada quien agarra(do) su chambelán"-...
Las dos horas siguientes fueron de reglamentario "ligoneo-ques-que-te-estoy-enseñando-a-jugar-pero-acerca-más-la-pompa-para-acá" y todo estaba dando excelentes resultados, cuando de la nada, a la chavita que estaba con Alex se le ocurre aventar la propuesta al aire que nos puso (a los tres), como perros de carnicería: babeantes, mansos, mensos y espectantes...

"¿Por qué no mejor nos vamos a mi casa, ahorita no hay nadie, mis jefes andan de viaje y estamos más a gusto los 6?"

Y es que en el tono de con el que pronunció lo anterior, aunado con la cara de cómplice de las otras 2 y esa manera tan cachonda de decir: "mis jefes andan de viaje", pues rápido sacamos conjeturas de que andaban realmente echando desmadre y que esa tarde "cenaba pancho".

Creo que se tardó más en hacer la propuesta, que en lo que nosotros ya estábamos entregando el triángulo en la caja del billar.

Al salir, esta chavita -que no recuerdo como se llamaba- nos dijo que traía coche, que nos "trepáramos a su camioneta", una Tsubame color plata. Y al terminar de decir: "caaaammiooooonneeeet" -plac, plac,- se cerraron las puertas con nosotros ya acomodaditos con su niña "rebel" al lado.

Los primeros 20 minutos de trayecto se nos fueron como agua, cada quien en terapia de senso-percepción con su chavita... todos menos el pobre de Alex que iba en el asiento de copiloto con ganas de cambiar por que la que "le tocaba" iba manejando.

Después de otros 20 minutos Toño con su elemental sutileza preguntó:

-TOÑO: ¿Todavía falta mucho para llegar a tu casa?
-CHAVITA CONDUCTORA: ¿MMmmm, no, ya no tanto...?

Así que le seguimos al cachondeo, dejando al pobre Pooh, aburrido y platicando no se de qué con la conductora, para que nosotros siguiéramos en nuestra sesión terapéutica...

Torres de Satélite...
...
Salida a carretera...
...
Pasamos Cuautitlán Izcalli...
...
20 minutos después de Cuautitlán Izcalli...
...
30 minutos después de Cuautitlan Izcalli...

-NACHO (ya con cara de preocupación): ¿Falta mucho papá pitufo?
-CHAVITA CONDUCTORA: No... jejeje, ya casi llegamos...

...
40 minutos después de Cuautitlán Izcalli

En una zona medio residencial nos metimos (¿A la derecha?), y pasando un parque, estábamos admirando el lugar donde nuestros preparatorianos deseos carnales iban a ser calmados...

En ese punto de contemplación estábamos, cuando de la nada sale de la casa una "Ñora" reque-te-emputada, gritando pestes a diestra y siniestra alegando que ¿Cómo era posible que fueran tan estúpidas... que si no se les cancelaba el viaje a último momento quien sabe que hubieran hecho... que ¿Quién chingados, eramos nosotros?... y como de película de la greña y todo metieron a las chavitas a la casa...

Así que ahí estábamos, a las 8 de la noche en San Juan de la Chingada con 10 pesos entre los 3, con todo un plan sexual tirado por los suelos, con miedo de que mandaran traer una patrulla que defendiera la "virtud" de las chavitas y sin una pinche idea de como regresar a la civilización...

Así que nos sentamos en el parque a echarnos un tabaco mientras ideábamos una manera de solucionar nuestra situación...

Para terminar de darle el toque "hollywoodense" a la historia, estábamos acabando de echar el cigarrito y cagados de risa nerviosa (por que Toño sacó la frase célebre de: "chale, aqui ya cambias de uso horario), cuando vimos a "la chavita conductora" salirse por una ventana, que supongo era del baño, treparse a la camioneta, arrancarla, llegar con nosotros gritando:
"trépense, trépense en chinga"

Nos subimos, y al salir del fracionamiento nos dió su explicación...

"Le cancelaron el viaje a mis jefes, los llevo al metro Toreo, por que si no no hay como regresarse y no quiero que mi papá los apañe... "

A lo que solo pudimos decir : OK, gracias...

Ese día llegué a mi casa como a las 1:30 y caminando, por que a la hora que llegué a C.U. ya no salían camiones para acá, así que tuve que subirme al metro y transbordar un friego de estaciones para llegar a otro sitio donde me subí en el último camión que me dejaba como a 2 Km, y a caminar...

Ese día, sí resentí el cambio de horario.

Etiquetas:

posted by Nacho @ 10:57 p.m.,

9 Comments:

At 8:01 a.m., Blogger elisa said...

¿ya ven? por andar de cuscos, ja ja.
Buena historia mi Nacho.
Un abrazo

 
At 10:37 a.m., Blogger Chilanga Catastrófica said...

¡¡Qué buen relato!! me hiciste reír, sobretodo porque me imaginé perfecto la escena de la mamá metiendo a la chavita de la "greña".
Un beso.

 
At 11:29 a.m., Blogger Kekita said...

JAJAJA. Deberías de escribir un libro con todas tus chocoaventuras, te juro que sería la primera en comprarlo.

 
At 4:56 p.m., Anonymous Anónimo said...

Ay mijo! Ya no recordaba este episodio, el recuerdo me cae que me ha hecho reir de a madres

Bloodbat

 
At 8:09 p.m., Blogger Miss Neumann said...

JA , JA Y MAS JA. Lo siento no es burla, pero me rei un chorro...

 
At 11:34 p.m., Anonymous Anónimo said...

Para el proximo recuerdo, uno mas marciano...aquella vez del huevo vibratorio con yema negra...remember?

Bloodbat

 
At 11:52 p.m., Blogger Nacho said...

Daria: Sip, eso de andar de cuscos nos ha causado muchos problemas... (Pero que rico fué).

Catástrofismos: Neto la regañiza fué de record...

Keka: Lo he pensado, pero es que no las tengo frescas en la memoria, repentinamente me acuerdo (o me acuerdan) y las escribo...

Bloodbat1: Jejeje, neto que fué histórico... gustazo leerle por acá.

Miss Neumann: Puedo decir con gusto que he hecho reir a una "histérica-adorable". :D

Lorenzo: Bienvenido, ojalá andes por acá seguido.

Bloodbat2: Ese recuerdo es muy escalofriante... tal vez posteé el de "shit happens". Abrazo hermano.

A TODOS: Gracias por escribir :D

 
At 12:21 a.m., Blogger María said...

Qué cagada historia, Don Ignacio! y tan seriecillo que se veía, jajajajaja. Al final qué bien que la chava les echó la mano para la vuelta, si no, a saber a cuáles se habrían tenido que ligar para regresar a este lado del Ecuador. Besos.

 
At 1:31 a.m., Blogger Damewanze said...

que chila histiria, a mi em pasaron muchas cosas de adolescente, y pareciadas asi de que vamos a mi casa, pero para tomar y esas cosas no para algo mas, como mis papas casi nunca estaba. Que bien que la morra se escapo y les dio un aventon,no se vio tan ojete de dejarlos ahi..

saludos, sabes ser chica y vestir de negro no me a hecho tener pegue.. me vestire de tinkerbell

 

Publicar un comentario

<< Home